19 de des. 2011

No puedo escribir (Андрея Рублева, y 2)



Definitivamente: no puedo escribir sobre Andrei Rubliev. Dudo incluso de este nombre: ¿cuál sería la transcripción correcta para Андрея Рублева? Aunque ese es un problema menor, sólo para muy quisquillosos o gente muy culta. Ninguno de los dos casos no es mi caso.

No puedo escribir con tanto ruido de fondo. Mañana (mañana mismo) podrían decirme si sigo en el trabajo, o si ya no tengo que volver, muchas gracias por todo, con la que nos está cayendo debes comprenderlo, y entonces hay que coleccionar los papeles para irse al INEM.

Se trata de lo siguiente: un pintor recibe el encargo de irse a una iglesia a pintar imágenes piadosas que le den esperanzas, paz o quietud a quién allí se adentra, a rezar o a cobijarse. A los que huyen del horror. Durante dos horas muy largas, el pintor no pinta nada. No puede. Apenas un manotazo en la pared recién encalada, con la mano sucia que se estampa en el blanco como un grito oscuro. La furia y el terror están ahí.

¿Cómo se puede escribir sobre ese momento?



El pintor piensa cuál debería ser su trabajo, para quién pinta, porqué pinta. Mientras los demás lloran o son torturados, o vejados, o perseguidos. ¿De verdad puedo escribir en un blog y escribir sobre un director de cine ruso que murió hace años dejando siete cintas de celuloide?

La cinta titulada así (Andrei Rubliev) tiene un prólogo: unos individuos han construido un globo areostático que se levanta, tambaleante e impreciso, pero atañe el cielo. Aunque uno diría que ese globo se dará de bruces contra el suelo en cuanto estés confiado. Y un prólogo: un titubeante y adolescente artesano funde hierro y arranca de la tierra una campana enorme. Ahí enmedio está la historia del pintor. Ahora dejaría caer mi cabeza sobre tu hombro, como ayer, medio desnudo, en el sofá de tu casa -o en la mía. Y de repente te preguntaría:
-¿Porqué no puede dar ni una sola pincelada Andrei Rubliev?


¿Porqué este tiempo de duda y de parálisis es tan bello? No nos queda nada más que eso: ver la belleza allí donde parecía no haber nada. O sólo dolor y gritos y desesperación. No los había. No había nada de eso. Sólo había la increíble belleza constante, como los bajos continuos de Bach. La belleza que nunca cesa, nunca se detiene, nunca se va.


12 comentaris:

  1. todo se repite en un circulo eterno... que no acaba mai, el peix que es mossega la cua. No esperaba que Tarkovski fos creient.

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  2. Ojalá sigas. Y por lo demás, reivindiquemos siempre las máscaras, porque esa es una manera de reivindicarnos también a nosotros mismos, de reivindicar también la verdad.

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  3. No pots escriure però pots filmar...
    Digame honestamente
    Es la gente ignorante o no?
    aquests trosos de pel·lícula que treus de context son boníssims, segur que la pel·lícula sencera deu ser molt lenta, però vista així, en petits fragments es genial

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  4. Francesc: més que creient, jo diria que Tarkovski arriba a la fe per la via de la mística. No me l'imagino gaire a missa, però sí ficat en alguna mena de diàleg directe amb el seu déu.

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  5. Eastriver: la máscara es justamente eso, lo que nos permite decir las verdades. Posiblemente por eso está prohibido llevar máscaras en determinados sitios y sin embargo es obligatorio en otros.

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  6. Aris: a "Rubliev" hi ha uns quants diàlegs brutals. Aquest n'és un. Jo no diria que sigui una pel·lícula lenta, tot i que és de metratge llarg i té moltes seqüències descriptives. Però també hi ha guerres, assetjaments, persecucions, etc. I una curiosa escena en què l'exèrcit prova d'exterminar una comuna nudista enmig del bosc.

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  7. A mi avui em passa el mateix, és el temut Sindrome del Full Blanc. Tranquil, a Verlaine li passava sobint i és passatger. Salutacions. Miraré de trobar aquesta pel.lícula. Borgo.

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  8. De eso va el tema, Lluís, de eso precisamente, pero para encontrar belleza no sé si es suficiente con mirar... Un abrazo.

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  9. Miquel: més que la Sïndrome del Full en Blanc, diria que és la sensació que determinades coses no es poden traslladar en paraules. De vegades és l'horror, tal com expliquen els supervivents de la Shoah, o de vegades la bellesa inexplicable.

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  10. Juan: diría que en efecto no es suficiente con ver ni con mirar. Hay que disponer de otros instrumentos, ero sobretodo hay que buscar, estar atentos y saber hacia dónde debemos mirar. Y hacia dónde no debemos volver la mirada. Siempre hay algo de desesperados Orfeos en todo esto.

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  11. No sempre es pot escriure. Malgrat tot, en moments com els teus, és necessari escriure, cridar o filmar que ve a ser el mateix.
    Esperem que continuis a la feina i que continuis cridant perquè en les formes que vulguis perquè ser-hi ja és cridar.

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  12. Galderich: segur que expressar (-me) és la darrera cosa que em prendran o que perdré.

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